El tejo, un árbol que puede ser mortal para las personas y del que se conservan alrededor de 300.000 ejemplares en España. Es una de las especies naturales más utilizadas por la medicina para combatir el cáncer gracias a los “taxanos” que contienen su corteza y hojas
Así lo ha explicado hoy a EFE Fernando Vasco, secretario de la Asociación Amigos del Tejo y las Tejedas. Este domingo ha celebrado unas jornadas explicativas en torno a este árbol en el pueblo salmantino de Monsagro, ubicado en el Parque Natural de Las Batuecas.
Los taxanos del tejo eran efectivos para curar el cáncer de ovarios
El tejo (“Taxus”) fue descubierto como anticancerígeno a finales de los años 50 gracias a un estudio de investigación que se desarrolló en Estados Unidos con 6.000 especies vegetales, por lo que, tras diversos ensayos, se descubrió en 1970 que los taxanos del tejo eran efectivos para combatir el cáncer curar el cáncer de ovarios.
Fernando Vasco explica a EFE que en la actualidad se sabe que en los tejos, un árbol muchas veces repudiado por su toxicidad y que puede llegar a ser mortal por ingesta en el hombre. Hay tres componentes en sus hojas y en la corteza que se usan para combatir hasta catorce tipos de cáncer, como el de próstata, ovario, mama, cabeza o cuello, entre otros.
En un principio, este descubrimiento fue “terrible” para la supervivencia del tejo en muchos puntos del planeta, ya que, como han apuntado desde la Asociación del Tejo, se hicieron talas indiscriminadas.
En China o La India, por ejemplo, los grupos ecologistas lograron paralizar las talas indiscriminadas de este árbol en los años 80, después de que se hubieran cortado casi dos millones de ejemplares de tejos negros.
Se llegó a crear una industria para la obtención de los taxanos
“En una ciudad de China, en el año 1995, se llegó a crear una industria basada en la recolección de hojas y corteza de tejo para la obtención de los taxanos”, ha recordado Fernando Vasco.
Sin embargo, las propiedades del tejo se pueden seguir utilizando sin la tala de los árboles gracias a la síntesis química de estos tres taxanos, denominados “paclitaxel”, “docetaxel” y “cabazitaxel”.
Todos ellos son conocidos de forma genérica como Taxol. Es la marca con la que se comercializa en el mundo de la medicina para su aplicación en tratamientos para combatir el cáncer.
El Taxol “es uno de los mejores inhibidores de la división celular y no permite la mitosis”, de ahí sus propiedades curativas y sus grandes posibilidades en la medicina.
En el día de hoy, los vecinos de la Sierra de Francia, un enclave del sur de Salamanca donde se concentra una buena población de tejos, han podido escuchar a este grupo de expertos y saber más de este singular árbol.
La ingesta de alguna parte del tejo es muy tóxica e, incluso, mortal para el hombre. Pero esas mismas sustancias nocivas, se usan en medicina para combatir muchos tipos de cáncer y han salvado la vida de miles de personas.
Deja tu comentario